lunes, 13 de octubre de 2008

La última pal pescao. Capítulo 3

Capítulo 3

¡Ay qué vergüenza! Anoche cuando mi Paco se durmió me fui al salón y me puse la película guarra del Canal Plus a ver si aprendía algo. Ay, yo no sé si voy a saber hacer eso, que mueven la lengua muy rápido… ¡Con lo fácil que es una pilila, que pa' dentro y ya está! Bueno, yo he decidido que primero la mano y la lengua ya la meteré más adelante

Así que esta mañana me he cortado las uñas bien cortitas y he tirado para el mercado. Al principio la verdad es que me ha dado un poco de vergüenza, pero cuando he visto la cara de contenta que se le ponía, yo he tirado para delante. Hay muchas cosas ahí abajo y me ha tenido que ayudar un poco, porque no me decidía entre meterme para dentro o quedarme donde el "clítoris" ese. Al final han sido las dos cosas. Yo creía que no iba muy bien, pero de repente me ha empezado a agarrar de la espalda y del pelo y de todas partes y se ha empezado a rebullir hasta que hemos acabado la faena

No sabía yo que me iba a sentar tan bien hacerle eso a una mujer. He llegado a casa más inflada que un pavo. Hasta mi Paco me ha dicho que si me pasaba algo… ay, me da un apuro mentirle… ¡pero a mí de esto no me quita nadie! ¡Que me quiten lo bailao!

Ahora que la alegría me ha durado poco, porque ha llegado mi mayor de clase con las notas y ha suspendido siete. Y encima Paco es que no le dice nada, porque le tiene de un mimado… Y lo que yo digo es, pero siete… ¿¿de cuántas??

lunes, 6 de octubre de 2008

La última pal pescao. Capítulo 2

Capítulo 2

Hoy he ido otra vez al mercado. Tenía en casa apaños y no me hacía falta hacer compra, pero he ido por hablar con Josefa, para decirle que yo no soy de esas que se andan besando con mujeres. Pero a lo mejor sí que voy a ser, porque he acabado otra vez con la falda arremangada…

Josefa me ha enseñado hoy una palabra que no conocía: "clítoris". Yo no la conocía, pero por lo visto mi Paco tampoco. Esto lo deberían enseñar en la escuela, porque a mí me ha dado más alegría esta palabra que dos hijos que tengo como dos soles

Yo no sé qué va a pasar con esto, porque yo iba con la intención de cortar por lo sano, pero es que cuando me ha mirado ahí desde su puesto me ha entrado una cosa por todo el cuerpo… un cosquilleo, unos calores… Que vamos, me he metido en la trastienda a esperarla y me he quitado las bragas. Así como te lo cuento

Me da un poco de apuro por Josefa, porque yo todavía no me atrevo a meter la mano ahí. Pero lo que es ella, mete la mano y lo que no es la mano…

Me hace ilusión todo esto que me está pasando, y salirme de la rutina y del aburrimiento… Me levanto de otra manera por las mañanas. Y además me deja los lenguados tiraos de precio

sábado, 4 de octubre de 2008

Perendengues

El otro día experimenté la felicidad. Fue durante escasos segundos, pero aún así, la sentí. Muchos pensaréis "¿Ox y felicidad en la misma frase? ¡Cielo Santo, el Apocalipsis se aproxima!", pero tranquilos, ya se me ha pasado y el devenir del mundo puede volver a su cauce con total normalidad

Fue una sensación de lo más extraña, porque me puse a sonreír y ni siquiera me daba cuenta de que estaba sonriendo. Es extraño que solamente un pensamiento, una imagen, pueda tener tanto poder sobre una persona... El camino a mi corta felicidad lo encontraréis en este link



Sí queridos... ¡algún emisario del cielo con una cámara ha pillado a Rafa Nadal enseñando las posaderas! No puedo con la vida. Yo eso lo tendría expuesto en mi casa, en plan minimal, presidiendo una habitación. Además es un culo útil, seguro que tiras una nuez contra él y la nuez se parte; y seguro que si lo chascas un par de veces con una piedra, puedes encender una fogata, así en plan romántico.


Poco más tengo que contar... que ando muy atareada con todas las Fashion Weeks de todas partes (qué manía con hacerlas todas a la vez, joder, ¡que no me da tiempo a ver tanta foto!); que quiero que haga más frío pero sin llover, para estrenar mis minnetonka; y que Wayaiu ha traído nuevos inquilinos al piso... ¡caracoles manzana! Más monos son... Ya los amo, y eso que a mí las cosas viscosas no me despiertan precisamente instinto maternal


Obsesiones de estos días: conseguir unas gafas de Prada de oferta y Alejandra Pizarnik